Acerca de PFDN

La Red de Trastornos del Piso Pélvico (PFDN) es una red de investigación creada para estudiar los trastornos del piso pélvico y brindar respuestas basadas en evidencia para las mujeres y proveedores de atención médica sobre las opciones de tratamiento para estas condiciones. La PFDN fue fundada en 2001 por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver de los Institutos Nacionales de Salud.

Un cuarto de todas las mujeres adultas en los Estados Unidos reportan tener al menos un trastorno del piso pélvico, incluyendo incontinencia urinaria, incontinencia fecal y prolapso de los órganos pélvicos.* Estas condiciones pueden tener un impacto negativo en la calidad de vida de una mujer, incluida su función sexual y su capacidad para vivir su vida diaria sin síntomas y sin preocuparse por accidentes vergonzosos.

Estudios Activos

Abierta la inscripción

BASIS

Inyección transuretral de aumento de volumen uretral versus Cabestrillo de una incisión para la incontinencia urinaria de esfuerzo

El propósito del estudio clinico “BASIS” es comparar dos tratamientos para personas con incontinencia urinaria de esfuerzo (IUE). La incontinencia urinaria de esfuerzo es la pérdida de orina que ocurre con esfuerzo físico, por ejemplo al reír, toser o levantar un objeto pesado. Los dos tratamientos de este estudio son el agente de volumen transuretral (ACT) y el cabestrillo de incisión simple (CIS). Actualmente existe evidencia que sugiere que el ACT y el CIS pueden ser menos efectivos para tratar la IUE, pero es importante estudiar estos procedimientos dado que son opciones de tratamiento menos invasivos con menor cantidad de complicaciones que los procedimientos tradicionales de cabestrillo mediouretral de longitud completa. Estos tratamientos son procedimientos ambulatorios disponibles en el mercado y aprobados por la FDA para pacientes con IUE, y no usan o usan menos material de malla que los procedimientos tradicionales de cabestrillo mediouretral de longitud completa. El propósito primario del estudio es evaluar cómo el ACT y el CIS se comparan entre sí como tratamientos para la IUE un año después del tratamiento.

TULIP

Entrenamiento para la mejora de la pérdida urinaria después del embarazo

Para las mamás primerizas, la pérdida de orina puede ser molesta e incómoda. Como participante del estudio TULIP, conocerá estrategias para mejorar el control de la vejiga y cómo los músculos pélvicos sostienen su vejiga. Este estudio busca ver de qué manera las diferentes maneras de fortalecer estos músculos pélvicos pueden mejorar la pérdida de orina a lo largo de 12 meses. El objetivo de este estudio de investigación es determinar la efectividad de la educación sobre los cambios en el estilo de vida (p. ej., prestar atención a lo que come y bebe, realizar ejercicio, perder peso) y fortalecer los músculos pélvicos para el tratamiento de la pérdida de orina molesta después del parto de su primer bebé. Esta educación se hará con o sin capacitación adicional sobre el fortalecimiento de los músculos pélvicos, ya sea mediante el uso de ejercicios con capacitación presencial (es decir, 2 sesiones con un entrenador capacitado en la visita inicial y 3 meses después del parto) o un dispositivo basado en la movilidad de uso domiciliario (es decir, un dispositivo intravaginal que se comunica de manera inalámbrica a una aplicación instalada en su teléfono inteligente que le indica cuando los ejercicios se realizan de manera correcta).

Vídeo informativo de estudio

Estudios en curso

BioLIFT

Biofabricación de refuerzo vaginal mediante el uso de células derivadas de la vagina

El estudio de viabilidad de la biofabricación de refuerzo vaginal mediante el uso de células derivadas de la vagina (BioLIFT) evalúa si es posible desarrollar ligamentos en un laboratorio usando células obtenidas de la vagina de una mujer al momento de cirugía. Si esto es posible, los investigadores estudiarán si los ligamentos podrían utilizarse en una cirugía para reparar prolapso vaginal o uterino en esa misma mujer, y así mejorar la duración de la cirugía reparadora.

E-ASPIRE

Extensión de la reparación de suspensión apical para el prolapso de la cúpula vaginal

El estudio E-ASPIRe extiende el seguimiento de las mujeres que participan en el ensayo clínico ASPIRe hasta 10 años desde el momento de la cirugía. El objetivo principal de ASPIRe fue averiguar de qué modo los resultados de los procedimientos quirúrgicos (sacrocolpopexia abdominal, reparación con tejido nativo o reparación apical con malla transvaginal) se comparan entre sí, así como las ventajas y/o desventajas, riesgos y beneficios, y el efecto en la calidad de vida de cada cirugía, al utilizarse para la reparación del prolapso de la cúpula vaginal (apical). La cohorte de ASPIRe representa una oportunidad única para entender los resultados de eficacia y seguridad a más largo plazo de una reparación con tejido nativo, de la malla transvaginal y la sacrocolpopexia abdominal para el prolapso apical (de la cúpula vaginal) después de la histerectomía. Las participantes completaran visitas del estudio anuales, ya sea presenciales o de forma remota, y completarán una serie abreviada de cuestionarios (PFDI-20, PFIQ, PGI-I, PISQ-IR, SF-12, DRS-SDS).

E-SUPeR

Extensión del estudio de procedimientos para prolapso uterino

El estudio E-SUPeR extiende el seguimiento de las mujeres que participan en el ensayo clínico SUPeR hasta 10 años desde el momento de la cirugía. El objetivo principal de SUPeR fue determinar si el éxito del tratamiento en mujeres con prolapso uterovaginal sintomático sometidas a histeropexia aumentada con malla transvaginal difiere de el de las mujeres que se someten a histerectomía vaginal y suspensión de la cúpula vaginal con de tejido nativo en puntos temporales a lo largo de 3 años. La población de participantes de SUPeR representa una oportunidad única para entender los resultados de eficacia y seguridad a más largo plazo de una reparación con tejido nativo y una histeropexia con malla. Las participantes serán observadas una vez al año a través de un examen físico y se les pedirá que completen una serie abreviada de cuestionarios (PFDI-20, PFIQ, PGI-I, ISI y PISQ-IR.)

Preguntas frecuentes

Los trastornos del piso pélvico son problemas que afectan a los órganos pélvicos femeninos: el útero (o matriz), la vagina, la vejiga, el recto y los músculos que los rodean y sostienen. Los tres problemas más frecuentes son el prolapso de los órganos pélvicos y problemas de control de la vejiga o control intestinal. Cada uno de estos problemas se describe a continuación. Si desea obtener más información acerca de los problemas del piso pélvico, visite los sitios web al final de esta página.

El prolapso de los órganos pélvicos es un término general que se utiliza para describir un grupo de problemas. El prolapso se produce cuando uno o más órganos de la pelvis (vejiga, útero, intestino delgado o recto) caen dentro de la vagina. Los distintos términos que describen el prolapso incluyen “cistocele” o “vejiga caída”; “prolapso uterino” o “útero caído”; “rectocele” o “enterocele”.

Algunas mujeres con prolapso pueden ver o sentir un ‘bulto’ o ‘algo que sobresale’ en el orificio de la vagina. Otras con prolapso temprano no saben que tienen prolapso porque no tienen esta sensación o síntomas. El prolapso no es mortal, pero puede resultar incómodo. El prolapso a veces dificulta a las mujeres hacer algunas cosas que desean, como el ejercicio. A veces también les dificulta vaciar la vejiga con normalidad.

El problema más frecuente de vejiga es la incontinencia urinaria, que es cuando las mujeres tienen pérdidas involuntarias de orina. Muchas mujeres sufrirán pérdidas de orina en algún momento de su vida. Dado que esto es tan común, muchas mujeres creen que es normal y no le informan a sus médicos. Al mismo tiempo, muchos médicos no les preguntan a las mujeres si están teniendo problemas de control de la vejiga. Como resultado, muchas mujeres con estos problemas no reciben tratamiento y sufren en silencio. Esto no tiene que ser así; todas las mujeres pueden recibir tratamiento, por lo general sin necesidad de cirugía, y casi todos los problemas de vejiga pueden mejorar.

Algunas mujeres con problemas intestinales tienen pérdida involuntaria de materia fecal por el recto. Esto se llama “incontinencia fecal”. Pueden perder materia fecal líquida o sólida. Las mujeres con este problema también pueden tener problemas para controlar los gases. Como ocurre con los problemas de vejiga, muchas mujeres viven con este problema sin decirle a nadie, ni siquiera a su médico. Algunas mujeres incluso tienen problemas de vejiga y problemas intestinales al mismo tiempo.

Recuerde, hay tratamientos disponibles para todos los tipos de problemas del piso pélvico.

Acerca de los ensayos clínicos

La Red de Trastornos del Piso Pélvico conduce estudios de investigación clínica para conocer más sobre cómo ayudar a las mujeres con problemas del piso pélvico. Algunos de estos estudios son ensayos clínicos. Las mujeres que están considerando si desean participar en estos estudios suelen tener preguntas sobre la investigación clínica y los ensayos clínicos. La información que figura en esta página y los enlaces al final de la página brindan información adicional que ayuda a responder estas preguntas.

La investigación clínica es una investigación que involucra directamente a una persona en particular o un grupo de personas o emplea material obtenido de humanos, como su comportamiento o muestras de su tejido, para responder importantes preguntas, clínicas o relacionadas con la salud. Un ensayo clínico es un estudio de investigación en el que participan seres humanos voluntariamente para responder preguntas específicas de la salud. Los ensayos clínicos realizados cuidadosamente son la forma más segura y rápida de encontrar tratamientos que funcionen en las personas, y nuevas maneras de mejorar la salud. Cada estudio intenta responder preguntas científicas y encontrar mejores maneras de prevenir, diagnosticar o tratar enfermedades en seres humanos. Los distintos tipos de ensayos clínicos dentro de la Red de Trastornos del Piso Pélvico son:

  • Los ensayos de tratamientos prueban nuevos tratamientos (como un medicamento nuevo para reducir la incontinencia, nuevos métodos quirúrgicos o procedimientos mejorados de la terapia conductual).
  • Los ensayos de prevención prueban nuevos métodos, como medicamentos, regímenes de ejercicios o procedimientos quirúrgicos que los médicos consideran que pueden reducir el riesgo de sufrir un trastorno específico del piso pélvico.
  • Los ensayos de detección prueban la mejor manera de detectar trastornos específicos del piso pélvico, o de identificar a personas con características que hacen que el trastorno se trate con mayor facilidad tomando las medidas específicas.
  • Los ensayos de diagnóstico se realizan para encontrar mejores maneras o procedimientos para diagnosticar una enfermedad o condición en particular. Los ensayos de diagnóstico suelen incluir a personas que presentan signos o síntomas de la enfermedad o condición que se está estudiando.
  • Los ensayos de calidad de vida (también llamados ensayos de cuidados paliativos) exploran formas de mejorar el bienestar y la calidad de vida de las personas con un problema crónico del piso pélvico.

Los ensayos clínicos ayudan a los médicos a conocer cuáles son las mejores pruebas y tratamientos para una determinada condición y ayudan a determinar si los tratamientos son seguros y efectivos para que las personas los usen. Los ensayos clínicos suelen comparar las opciones de tratamiento existentes para determinar cuál es mejor. Sin estos ensayos, los médicos no pueden conocer la mejor manera de diagnosticar o tratar un problema. Cuando un problema del piso pélvico tiene más de una opción de tratamiento, los médicos posiblemente no sepan qué tratamiento funciona mejor, dura más o tiene menos efectos secundarios. Por ejemplo, en el caso de las mujeres con problemas de control de vejiga, se les puede ofrecer medicación, fisioterapia o incluso cirugía. Un ensayo clínico podría comparar la medicación con la fisioterapia, y los resultados del ensayo podrían ayudar a los médicos y a las pacientes en el futuro a tomar la mejor decisión acerca de qué tratamiento elegir.

Antes de comenzar un ensayo clínico, los investigadores obtienen la aprobación de comités (como Comités de Revisión Institucional, o CRI) de sus centros médicos. Si está pensando en participar en un ensayo clínico, los investigadores le darán más información por escrito. Para la mayoría de los tipos de investigación, debe dar su permiso por escrito antes de poder participar en un ensayo clínico. La decisión de participar en un ensayo clínico depende de usted. Los investigadores responderán cualquier pregunta que tenga sobre la participación en un ensayo clínico antes de inscribirse.

Para obtener más información acerca de los ensayos clínicos que se están realizando, consulte ClinicalTrials.gov, que es una base de datos en línea, interactiva, gestionada por la Biblioteca Nacional de Medicina. Proporciona información acerca de investigaciones clínicas con apoyo federal y privado realizadas en voluntarios humanos. ClinicalTrials.gov se actualiza periódicamente y ofrece información sobre el propósito de cada ensayo, los requerimientos de elegibilidad, las ubicaciones y números de teléfono donde obtener más información. A continuación se encuentran los enlaces a otras fuentes de información:

ClinicalTrials.gov
https://clinicaltrials.gov/

National Institutes of Health (NIH)
https://clinicalstudies.info.nih.gov/what_is_study.html

Eunice Kennedy Shriver National Institute of Child Health and Human Development (NICHD)
https://www.nichd.nih.gov/health/clinical-research